La ley de ese país no reconoce la violación como un delito, por lo que el ataque sufrido por Gulnaz es tipificado más bien como un adulterio.
Gran polémica ha generado la historia de una mujer afgana identificada como Gulnaz, que podría librarse de una condena si acepta casarse con el hombre que la violó cuando tenía 19 años.
Cuando Gulnaz tenía 19 años, un hombre ingresó a su casa, cerró puertas y ventanas, la redujo y violó sin ninguna consideración. Producto de esta agresión sexual quedó embarazada de su hija que ahora tiene dos años.
A pesar de los hechos mencionados, las autoridades afganas la condenaron a doce años de cárcel, aunque podría librarse de la pena si acepta casarse con su atacante, que resultó ser el esposo de una prima.
La ley de ese país no reconoce la violación como un delito, por lo que el ataque sufrido por Gulnaz es tipificado más bien como un adulterio, que de acuerdo a los artículos 426 y 428 del Código Penal afgano es castigado con cárcel de cinco a quince años.
Además, es difícil distinguir entre una violación y un adulterio en un país donde el hombre es considerado superior a la mujer y con tribunales corruptos dispuestos a inclinarse por el género masculino. Asimismo, las jóvenes suelen callar los ataques de los que son víctimas para evitar la suerte que ahora corre Gulnaz.
Si bien el caso en polémica no es el único en Afganistán, es el primero en que una víctima denuncia el atropello en medios de comunicación extranjeros.
De otro lado, gran sorpresa ha generado en la comunidad internacional que la Unión Europea prohíba la difusión de una documental que relata los dramas de dos mujeres encarceladas: una también por violación y la otra por escapar de un esposo que la maltrataba.
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